Hay ciertas de reglas de etiqueta para algunos eventos, por ejemplo, las conocidas reglas para asistir a una boda o un evento de gala, pero en nuestra vida cotidiana, podemos encontrar algunas otras actividades a las que aplicar también ciertas reglas de vestimenta como en el caso de las entrevistas de trabajo.
Vamos a ubicarnos en la situación: por fin has logrado que te llamen de un trabajo y planeas hacer todo lo que esté en tus manos para quedarte con el puesto, así que pones mano a la obra de inmediato para prepárate para el momento decisivo. Tienes tu cv listo, has practicado algunas preguntas y respuestas posibles, ¿qué podría salir mal? Pues te contamos que la forma en la que vestimos puede jugar un papel muy importante en la decisión del empleador.
Para que algo tan superficial como tu vestimenta no empañe tus logros profesionales y tu desempeño en la entrevista de trabajo, hemos consultado con los expertos en ropa laboral de Catalinos, mayorista de ropa de mujer al por mayor, y hemos elaborado un código de vestimenta que te será de utilidad para dar con la correcta primera impresión.
Infórmate sobre la compañía
Lo primero que debes hacer es informarte sobre la compañía para ubicarte en la realidad de la misma. Esto porque lo mejor es siempre adaptarse al estilo corporativo de la misma desde el momento de la entrevista.
Hay que investigar si se trata de una empresa financiera de carácter tradicional, una startup tecnológica, una consultora o una tienda; ya que esto determinará que tan elegante deberás ir vestido, que vestimenta será la más adecuada de acuerdo a los lineamientos y el ambiente de la oficina en la que aspiras trabajar y que tipo de imagen debes proyectar, ¿profesional, cómoda, conservadora o moderna?
Incluso, es buena idea que si conoces a alguien dentro de la compañía, le preguntes y pidas consejo.
Menos es más
Recuerda la regla principal del estilo y el buen gusto de “menos es más”. Por eso te recomendamos usar ropa sencilla, pero pulcra. Asimismo, elige colores neutros y evita aquellos que sean muy llamativos, sobre todo si la empresa es del tipo conservador.
Los mejores colores que te podemos recomendar son el azul marino, el gris, los colores tierra o el blanco. Aunque si se trata de una empresa juvenil y moderna, puedes jugar a añadir algún color que combine con esta imagen corporativa.
Tiende a la formalidad
Sea cual sea la empresa a la que vayas, no importa si es muy moderna, juvenil o relajada, siempre debes apostar a la formalidad. Hablamos de elegir camisas por sobre camisetas, prendas largas y no cortas, no tan ceñidas ni ajustadas, por supuesto que los escotes, en el caso de las mujeres, quedan fuera de lugar, blazers en lugar de cazadoras, camisas de manga larga en vez de tirantes, en el caso de las mujeres, y zapatos de salón en lugar de sandalias o deportivas. En otras palabras, hay que apostar por el estilo business casual.
Evita prendas llamativas
Aunque ya lo acotamos en el punto anterior, es un aspecto tan importante que hay que desarrollar en su propia sección, y se trata de: la extravagancia, o en otras palabras, que tan llamativos iremos a nuestra entrevista de trabajo.
Así que si te preguntas que tan llamativo puedes lucir, la respuesta segura es: nada. La regla de oro es la sencillez y esto tiene una razón de ser. Las prendas y colores llamativos pueden distraer la atención del entrevistador y reflejar la actitud errónea.
Evita aquella ropa que utilizarías para una salida nocturna como la ropa con brillo, lentejuelas, escotes pronunciados, o tacones excesivamente altos. Recuerda que la idea es resaltar por tu preparación y tus aptitudes y no por tu físico.
Igualmente se deben cuidar mucho los complementos, nada de zarcillos o pulseras demasiado grandes, incomodas o que puedan hacer ruido cuando te muevas, al igual que las mujeres deben cuidar no usar un maquillaje demasiado extravagante que no combine para nada con el ambiente laboral de una empresa seria.
Lo mismo sucede con el uso del perfume, el cual debe ser muy delicado o casi nulo para no desviar la atención del entrevistador. Incluso, en el caso de las mujeres, hay que cuidar hasta el color de las uñas, el cual no debe ser demasiado llamativo, pudiendo restar formalidad.
Escatima en accesorios
Como veníamos explicando en el punto anterior, las mujeres deben ser muy inteligentes y discretas a la hora de elegir los accesorios que llevarán a la entrevista. Estos no deben ser demasiado grandes o llamativos, ya que no combinarán en lo absoluto con la imagen de sencillez y formalidad que se quiere reflejar. Igualmente, estos podrían ser incomodos, hacer ruidos al movernos o quedarse enganchados en algún textil.
Lo mejor es escoger unos pendientes y dos anillos como mucho. Asimismo, si tenemos algún tatuaje, debemos intentar disimularlo, dentro de lo posible, en nuestro primer contacto.
Calzado
El calzado también es importante. Siempre es bueno usar zapatos cerrados que abiertos y por supuesto que cualquier que sea nuestra elección, estén siempre limpios.
Comodidad vs. descuido
Otro factor muy importante a la hora de una entrevista es sentirnos cómodos, de forma que podamos reflejar naturalidad y lo mejor de nuestra personalidad. Sin embargo, esto no debe confundirse con descuido.
Una cosa es vestirnos de forma que no sintamos cómodos y seguros, pero aun luciendo pulcros y profesionales, a vestirnos de una forma tan poco cuidada que nos reste responsabilidad y credibilidad.
Asimismo, no se debe ir sucio, con ropa sin planchar o prendas en mal estado que te hagan lucir como un candidato con una pobre higiene personal,
Higiene personal
La limpieza es un factor que saldrá a relucir, para bien o para mal. Por esto, debemos usar prendas en perfecto estado, y los hombres deben cuidar de ir bien afeitados y bien peinados.
Vaqueros, ¿sí o no?
Esta es una de las grandes dudas al momento de asistir a una entrevista, esto porque los jeans son piezas casi básicas e imprescindibles para muchas personas y hoy en día se ajustan a todo tipo de situación.
Sin embargo, que tan recomendables son dependerá más del tipo de empresa y del sector en el que te estás postulando. De ser admisible, siempre intenta utilizar vaqueros en perfecto estado, sin roturas, ni desteñidos, de colores oscuros y sin diseños llamativos y combinarlos con una prenda formal como una camisa blanca y una blazer. La idea es lucir profesional, pero con un toque juvenil y cómodo.
¿Falda o pantalón?
Esta es una duda más bien recurrente para las mujeres, quienes no se deciden si usar falda o pantalón por no saber que tan apropiada será una u otra opción.
Ante esto les traemos el alivio de confirmarles que cualquier de las dos opciones es perfectamente aceptable. Usar falda, vestido o pantalón dependerá de aquello con lo que se sientan más seguras, profesionales y formales. Eso sí, si te vas a decantar por los vestidos o faldas, debes cuidar que no sean cortos ni sugerentes.
Prendas estructuradas
Cuando se recomienda apostar por prendas estructuradas, lo que se quiere decir es que se elijan aquellos básicos imprescindibles que todos tenemos en nuestro armario y que sirven a la perfección para cualquier ocasión. Aquellas prendas que no pasan de moda, que reflejan formalidad, sencillez y que no desentonan en color y estilo.
De seguro que con esta descripción estás pensando en ese vestido negro, la camisa blanca de siempre, un blazer negro, un pantalón negro o una americana de rayas, y si es así, estás dando en el clavo. Justo son estas prendas con líneas rectas, corte geométricos y colores neutros te harán lucir al tino en tu entrevista.
Sé tú mismo
Si ya has tomado en cuenta todos estos consejos, lo único que te falta es armarte de seguridad y confianza.
Recuerda que lo más importante es ser tu mismo, que tu ropa refleje tu personalidad y que al momento de la entrevista muestres lo mejor de ti, de tus conocimientos, habilidades y valores y confíes que eres el correcto para ese puesto que tanto quieres.
Aunque si tienes que vestirte sencillo y formal y cuidar ciertos aspectos de tu apariencia, no se trata de disfrazarte de alguien más. Debes encontrar el punto perfecto en el que combines todas estas reglas de etiqueta con tu estilo personal y ese toque que te hace tu. Esta es la única forma que podrás demostrar quien eres.
Intenta adecuar los códigos de vestimenta de la empresa a tu esencia desde el primer momento y verás como logras encajar a la perfección.
Asimismo, nunca olvides ir preparado con tu cv y con las referencias o portafolio que avalen tus conocimientos y tu experiencia profesional, Igualmente parte de nuestra primera impresión es también una buena actitud, siempre positiva y confiada y por supuesto, lucir nuestra mejor sonrisa.
Recuerda también que tienes una sola oportunidad para demostrar de que estás hecho, pero habrán muchas más entrevistas de donde vino esta y si algo sale mal, no es el fin del mundo.