Dicen que tenemos una edad que viene reflejada en nuestro Documento Nacional de Identidad, el famoso DNI. Es cierto, pero muchas veces no se corresponde con la realidad. Porque soy de los que pienso que la edad de una persona no la marca su DNI, sino que lo marca el corazón. O lo que es lo mismo, las ganas de vivir la vida. Y ahí podemos tener la edad que queramos. Es cierto que los tiempos han cambiado, y una persona de 60 años ya no es lo mismo que en la generación de nuestros padres o de nuestros abuelos.
Ahora con 60 años, por poner una cifra, se puede estar muy vivo. Se puede estar con ganas de comerte el mundo, puedes estar con ganas de ser feliz y de hacer muchas cosas que durante las anteriores décadas no has podido hacer. La edad no tiene que ser un impedimento para nada. Por eso, hoy a través de este artículo queremos reflejas las muchas cosas que se pueden hacer pese a la edad. Y es que los años no tienen que ser un lastre que nos impidan realizarnos. Es cierto que luego dependerá de nuestro físico y de nuestras posibilidades, pero hoy te ofrecemos un amplio catálogo de todas las cosas que puedes hacer, o mejor dicho, aprender a partir de los 60 años. Ya os decimos que la edad no tiene que ser un muro para nada. Al revés, tenemos que ser capaces de aprovechar nuestra experiencia, y muchos casos, nuestro tiempo libre, para poder exprimir al máximo la vida.
Aprender a tocar un instrumento musical
Dicen que la música une a los pueblos, pero también sirve para sentirnos vivos. Por eso, nuestra recomendación es que a partir de los 60 años aprendas a tocar un instrumento musical, algo que es muy enriquecedor. Ejemplos nos pueden poner muchos desde Clases de Piano, ya que tienen cursos para personas adultas. Kristina Kryzanovskaya es la profesora de piano y solfeo con más de 10 años de experiencia dando clases de piano, y es la que reconoce que las personas mayores son muy aplicadas, y que es la mejor manera de poder conocer el mundo de la música.
Aprender a pintar o dibujar
AL igual que la música, el arte de pintar o de dibujar puede ser algo que hagamos desde los 60 años. Son muchos los talleres o cursos que se hacen en asociaciones. Luego esos cuadros se pueden convertir incluso en regalos.
Aprender un nuevo idioma
Nunca es tarde, y ahora que viajamos tanto, es el momento perfecto para aprender inglés o francés. Es cierto que no se trae base de los años escolares, pero quizás eso sea lo mejor. Llegar virgen para poder volar alto.
Aprender a cocinar platos nuevos y saludables
Ahora que hay tantos programas en televisión sobre cocina, se ha puesto de moda eso de ir a cursos o talleres para aprender a cocinar. Sobre todo viene muy bien para los hombres, ya que por la cultura machista de este país de los años 60, 70 y 80 no todos tienen estos conocimientos. Sin duda, una gran opción porque cocinando se pasa el tiempo volando.
Aprender a hacer ejercicio de forma segura y efectiva para mantenerse en forma
Si hacemos ejercicio podemos matar dos pájaros de un tiro. Además de estar entretenidos y sentirnos realizados, vamos a estar en forma, algo que es genial para las personas mayores de 60 años. Lo de apuntarse a un gimnasio es una gran idea.
Aprender a hacer jardinería o cuidado de plantas
Una gran alternativa para las personas que tienen mucha paciencia y les gusta quedarse en casa haciendo manualidades.
Aprender a practicar la meditación y el autocuidado
Si lo que queremos es sentirnos bien con nosotros mismos, pero a base de conocernos mejor, una gran opción es aprender a meditar.
Aprender a usar la tecnología y las redes sociales de forma eficiente
En los tiempos que corren si no sabes algo de nuevas tecnologías estás perdido. Por eso, es muy bueno apuntarse a cursos que nos sumerjan en estas cosas. Por ejemplo nos puede venir muy bien para hacer las gestiones del banco por Internet o para saberlo todo sobre el WhatsApp y poder hacer videollamadas con nuestros familiares. Y es que son muchas las barreras que se encuentran los mayores.
Aprender a bailar o hacer danza
Otro clásico que siempre está de moda, y es que a esa edad todavía nos gusta mucho lo de mover las caderas.
Aprender sobre historia o cultura de otros países viajando o mediante cursos y lecturas
Los conocimientos no tienen edad, por lo tanto siempre es bueno estar abierto a ampliar nuestros conocimientos.