Hay pocas cosas que sean más importantes que disponer de una garantía de comodidad y seguridad en casa. La verdad es que esta es una de las grandes claves de aquello que conocemos como calidad de vida y ese es motivo más que suficiente para que luchemos por conseguir esos estándares de seguridad y comodidad dentro de nuestro propio domicilio. Sin eso, ser felices es un poco más complicado. Y no debemos poner en peligro esa felicidad que, como seguro que vosotros y vosotras también pensáis, es el objetivo más grande que puede tener una persona a lo largo de su día a día.
Una de las grandes claves que existen para mantener esa comodidad y seguridad en casa tiene que ver con la limpieza y la higiene que existe en un lugar como del que estamos hablando. Se trata de aspectos que tienen una incidencia directa en nuestro día a día. Y es que la necesidad de mantener esa limpieza o higiene no solo gira en torno a la imagen que puede tener un visitante cuando visita nuestro domicilio. También tiene mucho que ver con aquello que denominamos seguridad. Si alguna parte de nuestra casa no está tan limpia como debería, existe el riesgo de que tengamos un accidente doméstico que puede entrañar consecuencias bastante graves para nuestra salud.
Da igual cual sea la naturaleza de nuestra vivienda y del número de personas que convivan dentro de ella: hay que mantener una determinada limpieza e higiene, y además hay que cuidar de estos aspectos de una manera continua. No nos podemos limitar a hacer una limpieza general cada determinados días. No. Hay que ir realizando también algunas tareas de desinfección de manera diaria. De lo contrario, es muy complicado que tengamos siquiera la posibilidad de ver asegurada esa seguridad y esa comodidad a las que nos estábamos refiriendo en los párrafos anteriores y que tanta incidencia tienen en nuestro día a día.
En lo que se refiere a un tema como del que estamos hablando, hay que decir algo: la pandemia que comenzó en marzo de 2020 y que tantos problemas ocasionó en materia social, sanitaria y económica a nuestra sociedad ha marcado un antes y un después. Antes de la llegada del coronavirus, casi todo el mundo concebía la limpieza o la higiene como algo importante, sí. Pero es que, después de la pandemia, para mucha gente esta actividad se ha convertido en lo primero, en lo primordial dentro de su domicilio. El coronavirus ha hecho que la gente se mentalice todavía más al respecto de la relevancia que se le otorga a limpiar y desinfectar las distintas partes de nuestro domicilio. Esa es la lección positiva que hemos adquirido de un periodo tan difícil y tan triste para el ser humano.
Una de las pruebas que más y mejor ponen de manifiesto ese aumento de la relevancia que ha adquirido la higiene dentro de casa es que todavía sigue aumentando la cantidad de productos relacionados con este tema que se venden. Lo han manifestado en repetidas ocasiones los y las profesionales de Stocknet Vallès, una entidad que cuenta con una amplia experiencia dentro de un sector como este, desde la pandemia. La desinfección de espacios en los que el cuerpo del ser humano se posa de manera diaria, tales como el baño o la cocina, son las más importantes para la gente.
Ni que decir tiene que se debe hacer todo aquello que esté en nuestra mano para continuar haciendo posible una cuestión como de la que estamos hablando. Una vivienda en la que no hay higiene presenta una serie de problemas que pueden ser nocivos para la salud de las personas y que pueden jugar una muy mala pasada a todo lo que tenga que ver con nuestra seguridad. Por poner solo un par de ejemplos, con suciedad se puede propagar de una manera más rápida un incendio o hay más riesgos de que padezcamos una plaga de insectos o mosquitos en casa. Solo con esto ya tenemos que procurar mantener esa limpieza entre nuestras paredes, ¿no os parece?
Serán muchas las personas que, una vez llegados a este punto, se pregunten si esas ganas de permanecer muy atentos a todo lo que tenga que ver con la limpieza se traduce en una inversión mayor de dinero. Como es lógico, cuanto más interés mostremos en un tema, más dinero vamos a invertir en él. Pero es mejor que tengamos en cuenta que resulta más barato apostar por la limpieza que terminar pagando por resolver todo lo malo que la falta de higiene puede provocar en el seno de un hogar, que no es un asunto menor y que va a tener un impacto muy grande en nuestro bolsillo además de en nuestra vida. Como dice el refrán, es mejor prevenir que curar. En el aspecto económico, también.
Además, y de acuerdo con una noticia que fue publicada en la página web de La Verdad, a la hora de limpiar se cometen unos errores que pueden generar una influencia a la hora de gastar más esos productos de limpieza que usamos para mantener bien cuidadas y limpias nuestras estancias. Saber corregir algunos malos hábitos nos puede conducir a gastar menos dinero sin que eso se traduzca necesariamente en una pérdida de limpieza en el hogar. Eso es muy importante porque nos va a permitir encontrar ese equilibrio entre la inversión en limpieza y la propia limpieza, un equilibrio que existe y que todos y todas debemos encontrar.
Es normal que, si no adquirimos esos buenos hábitos, nos hagamos preguntas como las que aparecen en esta noticia que os enlazamos a continuación y que proviene del portal web Autofácil. En ella, se hace un balance entre lo que nos puede llegar a costar más dinero: el mantenimiento del coche o el de la casa. Ese mantenimiento del vehículo que usamos siempre es algo que nos genera gastos porque, como es lógico, hay que invertir en gasolina, cambiar neumáticos, filtros… Siempre parece que es mayor el mantenimiento del coche, pero ojo: si no tenemos en cuenta algunas de las cosas que hemos indicado en el párrafo anterior, el mantener nuestra casa también puede costarnos un ojo de la cara.
Con el teletrabajo… de la limpieza también depende tu eficiencia
La eficiencia es el valor que más se tiene en cuenta en una persona cuando se encuentra dentro de su jornada laboral. Que seamos capaces de producir más en el menor tiempo posible depende en buena medida de la limpieza y la higiene de la que se disponga en el hogar ahora que el teletrabajo se ha empezado a destapar como una modalidad bastante compartida por muchas empresas. Esas personas que teletrabajan suelen tener habilitado un espacio dentro de su hogar para ello y no cabe la menor duda de que mantenerlo bien cuidado y libre de cualquier tipo de suciedad es algo que debemos tener siempre en cuenta.
Si nuestro espacio de trabajo no está todo lo limpio que debiera, vamos a notar cómo se reduce la eficiencia en nuestro trabajo… y es posible que las personas que se encuentran por encima de nosotros o nosotras nos den una reprimenda. Eso no es lo idóneo ni mucho menos y es evidente que es la situación en la que menos nos queremos ver. Y, como estamos diciendo, es algo en lo que un aspecto como la limpieza juega un papel mucho más que importante. Si todavía no le hemos dado a la limpieza el lugar que merece, es hora de que lo hagamos. La diferencia entre tenerla y no es simplemente sideral… y la diferencia entre los resultados que provoca una situación y la otra también es sideral.
Hay que promover en la medida de lo posible la limpieza en todos y cada uno de los ámbitos de los que se compone nuestra vida. Es uno de los valores que nunca han de despegarse del ser humano y que van a tener un impacto muy positivo si se producen. Ojalá que así sea en todos los casos, porque la verdad es que hay gente que todavía no le da la importancia a este asunto que merece. Y es una pena que así sea, sobre todo si estamos hablando de trabajo y de comodidad, que a fin de cuentas son dos de los aspectos con los que tenemos relación a diario y que determinan cómo va a ser nuestro día a día.
Que nunca se os olviden las cosas de las que hemos hablado a lo largo de todos estos párrafos. Son una de las mejores recomendaciones que os vais a encontrar en la vida y que más os van a facilitar la rutina diaria, os lo podemos asegurar. Y es que la limpieza e higiene juegan un papel que siempre va a ser importante con independencia de cuáles sean vuestros trabajos, de cómo sean vuestras casas o pisos y de cuánto dinero tengáis. En lo que tiene que ver con ellas, todos y todas somos iguales.