Como en casa en ningún sitio. Esta frase, que viene siendo famosa desde hace muchísimo tiempo, es una de las más reales y verdaderas que hemos podido escuchar a lo largo de nuestras vidas. Aunque nos guste mucho salir de casa a disfrutar de nuestro tiempo libre con amigos, familiares o colegas del trabajo, lo cierto es que donde más descansamos y donde más relajados estamos es en nuestro hogar, nuestra barrera de protección ante el mundo que se mueve ahí fuera. Nuestro hogar es nuestra guarida y, como tal, hay que valorarlo.
Además, estamos hablando del lugar en el que solemos pasar una mayor cantidad de horas al día. Solo con las que durmamos casi podemos igualar las que pasamos fuera por trabajo. De ahí que siempre se haya comentado que ser feliz en el hogar haga una contribución muy importante al hecho de que seamos felices con nuestra vida en general. Es evidente que así es y que esa relación existe y es tan real como la vida misma. Si solo quisiéramos salir para evadirnos de lo que nos pasa en nuestro hogar o de lo poco que nos gusta, tendríamos un problema al que deberíamos poner solución a la mayor brevedad posible.
Pero para que ese hogar sea cómodo para nosotros y nos encontremos a gusto dentro de él son necesarios bastantes factores. Una de las grandes claves es llevarnos bien con aquellas personas con las que convivamos. Puede darse el caso de que una persona viva con su pareja o sus hijos pero esa relación de familia no tenga grandes lazos. Y también se puede dar el caso contrario: que seamos compañeros de piso de una persona a la que hace un año no conocíamos, pero con la que hemos hecho migas y con la que, por tanto, vivimos perfectamente felices.
Al margen de las relaciones personales, también hay más cosas que pueden ayudarnos a tener una vida feliz en nuestra propia casa. Hablamos de los elementos que la componen y de otras cuestiones inherentes a ella, como la ubicación, el precio, la cercanía de servicios como supermercados u hospitales y la conexión con transportes públicos. En cuanto a los elementos que componen esa vivienda, es imprescindible señalar que los muebles tienen parte de la culpa de que una persona sea feliz o de que, por el contrario, no termine de esbozar una sonrisa cada vez que cruza la puerta de su hogar para entrar en él.
Cuando hablamos de que los muebles tienen una influencia a la hora de determinar la felicidad de una persona en su hogar no nos estamos refiriendo únicamente al hecho de que esos muebles sean útiles y estén bien distribuidos a lo largo del domicilio. Hay un factor como lo es el estilo de esos muebles, su color o su textura que también pueden proporcionar ese grado de alegría para con nuestra casa. Así nos lo han hecho saber desde Rioma, cuyos empleados y empleadas indican que aspectos como el color o la textura tienen ahora una importancia más grande que nunca.
Crece la demanda de muebles en el hogar
Hemos querido indagar cómo se encuentra la demanda de muebles en un país como el nuestro. Para ello, hemos recurrido a los siempre interesantes estudios realizados por Statista. Según lo que hemos podido comprobar, en el año 2020 hubo un descenso provocado por la llegada del coronavirus. En aquel ejercicio, el gasto de las familias españolas en esta partida superó los 6.100 millones de euros cuando solo dos años antes había facturado más de 2.000 millones de euros más. Ya sabemos que la pandemia afectó a prácticamente todos los sectores, siendo este uno de ellos.
Si seguimos observando la misma gráfica, veremos datos que también nos indican lo que sucedió desde el año 2005 al 2017. En el tercero de esos años, la facturación del sector superó con creces los 10.000 millones de euros. ¿Pero qué pasó después? Que llegó la que fue la peor crisis económica desde el crack de 1929. Todo lo que tenía que ver, aunque fuera de manera indirecta, con la construcción se fue al garete y, para el año 2014, la facturación de un sector como del que venimos hablando apenas superaba los 6.200 millones.
La facturación del año 2020 fue incluso peor que esa a la que justo acabamos de hacer referencia, pero eso se produjo como consecuencia de un coronavirus que, por suerte, cada vez es más historia. Así que, de cara a los años que están por venir, se prevé un aumento de la facturación del sector que ya se ha venido produciendo hasta este 2022 pero que sin duda va a seguir agrandándose. Estaremos aquí para verlo.