Solo hay que echar un vistazo a nuestro alrededor para comprobar que estamos rodeados de plástico. Y ya sabemos que es un material muy contaminante. Ahora bien, no todo el plástico contamina. El caso del biodegradable es muy curioso, porque es un plástico que no afecta al medio ambiente. El plástico biodegradable está diseñado para que, por acción de organismos vivos, lo utilicen como fuente de carbono y por lo tanto consumiendo el material plástico.
Algunos datos que tenemos del plástico normal son demoledores. Por ejemplo, cada minuto, se vende un millón de botellas de plástico en todo el mundo. Cada botella de plástico tarda unos 450 años en descomponerse. Si no está a la intemperie, la cifra se aproxima a los 1.000 años. Más del 90% de los plásticos del mundo se producen a partir de combustibles fósiles. El 42% del plástico utilizado en el mundo se destina al empaquetado de alimentos y productos manufacturados. Es decir, plásticos de un solo uso que apenas pasan unos minutos en las manos de los consumidores. Ante esta situación no queda otra que apostar por otro tipo de material.
Y es que sabemos que acabar con el plástico es imposible. No solo por su utilidad sino también por la importancia económica que tiene este material. Sin embargo, sí que podemos reinventar el plástico, y esto es lo que se ha hecho con el biodegradable. Toma nota porque vas a comprobar cómo otro tipo de vida es posible.
Cómo se fábrica
Para fabricar plásticos biodegradables se utiliza, principalmente, como materia prima el almidón, un polímero natural obtenido del maíz, del trigo o de la patata. Dentro de estas fuentes la que mejor resultados está dando es el almidón de patata, ya que aparte de ser un recurso renovable e inagotable, presenta ciclos de vida cortos y cerrados con altos rendimientos de cultivo por hectárea, bajos consumos de agua, impulsa el desarrollo del sector agrícola y potencia el cultivo de extensiones en vía de abandono.
Propiedades
En el almidón está presente la hidrofilicidad, la cual se forma por gran cantidad de grupos hidroxilo logrando así disminuir la absorción del agua pero esta disminución conlleva a un efecto negativo en la superficie de los productos plásticos biodegradables, por esta razón se han efectuado múltiples investigaciones en la modificación del almidón natural por medio de reacciones químicas que transforman los grupos hidroxilo ya sea asociándolos con otros polímeros menos hidrofílicos o cambiando los productos finales mediante vía física por métodos de bloqueo como recubrimientos superficiales.
Qué aportan al medio ambiente
Los materiales biodegradables aportan el beneficio de descomposición en un periodo de tiempo corto mediante la gestión de microorganismos que conllevan a la desaparición total del desecho. Las bacterias han desarrollado la capacidad de degradar los plásticos. Esto ya ha sucedido con el nylon: dos tipos de bacterias que comen el nylon , flavobacterias y Pseudomonas, y es posible que en el futuro, algunos grupos de microorganismos evolucionen sus rutas metabólicas para utilizar al plástico como sustrato.
Dónde está
Pues son muchas las empresas que han decidido apostar por este tipo de material. Por ejemplo en Plásticos Genil se han especializado en la fabricación y comercialización de bolsas de plástico biodegradables y compostables, idóneas para el comercio por su resistencia, flexibilidad y comodidad.
Estas bolsas de plástico para comercio, biodegradables, baratas y de primera calidad, son fabricadas con materias primas procedentes del almidón de maíz o de patata, bajo unos estrictos estándares de calidad que cumplen con la normativa EN 13432 que regula las bolsas biodegradables compostables. En estas nuestras bolsas de plástico biodegradables para farmacia y comercio aparecen claramente impresos, según las exigencias de la norma, los logotipos que la identifiquen como fabricada con materiales biodegradables compostables, los logos de la entidad certificadora que ha auditado el material del fabricante de la bolsa de plástico como material biodegradable compostable y el número de certificado del fabricante. Así que se puede apostar por las bolsas, siempre que cumplan con estas medidas. Seguro que ya lo has visto en los supermercados.
Los procesos de reciclaje en las industrias tienen un regulamiento de los materiales para garantizar la buena calidad de los productos reutilizados, por eso, podemos estar tranquilos porque se van a cumplir las medidas. ¿Qué te parece este tipo de plástico? Estamos seguros de que si todas las empresas tuvieran esta mentalidad verde, se podría hacer un mundo mejor y más respirable para todos.